Un lector usa claves de contexto cuando deduce el significado de una palabra que desconoce, con el apoyo de las palabras que le son familiares y que rodean a esa palabra desconocida dentro de una frase, un párrafo o un texto algo más largo. La enseñanza de sinónimos y antónimos es clave para incrementar el vocabulario y a ser más conscientes del significado de las palabras.
Antes de iniciar la lectura de un texto, es necesario explorar los conocimientos previos del estudiante relacionados con el contenido del texto por leer. Este proceso es interactivo entre el docente y los estudiantes, mediante estrategia de relación de ilustraciones; mediante la misma se explora los conocimientos que los estudiantes ya poseen estableciendo relaciones entre una palabra o frase con una imagen. El juego desarrollado es una sugerencia que puede ser adaptada y realizada previo al iniciar una lectura.
Un buen lector debe tener la capacidad de de inferencia pues le permitirá notar ciertas cosas que otros no lo hacen. Un lector que infiere es capaz de encontrar pistas o claves significativas, obtener más de una interpretación o significado de lo que lee, y encontrar datos e ideas específicas que el autor pretende transmitir.